Ser Sumisa
Busca un Dominante que le brinde un propósito tan placentero a tu vida, que estimule tu autoestima hasta el punto de ser capaz de enfrentar lo que sea, por obtener y generar placer.
Si escoges ser cobarde y evadir el dolor que la vida te propone, entonces perderás tu propio respeto, le mostrarás a tu mente que no puede confiar en sí misma para alcanzar sus metas. Habrás escogido el camino de autodestrucción diaria y reproches internos por no poder vivir todo lo que tú sabes que eres capaz de alcanzar.
En la penumbra de la incertidumbre, el placer siempre será el faro que te mantenga alejado del abuso y la miseria.
Un Verdadero Dominante te mostrará con su propio ejemplo, los beneficios del sufrimiento voluntario, donde puedas darle un significado a las emociones y los sentimientos de tu sexualidad, para aplicarlo a todos los ámbitos de tu vida.
La entrega de tu Sumisión es una decisión de vida, cuyo único objetivo es prepararte para destruir los límites irracionales de tu mente y resistir el sufrimiento inevitable de la vida.
Cuando logras comprender el verdadero placer de la Dominación, ya no sufres, ya no lloras, ya no te quejas. Solo queda la voluntad sobre el sacrificio y la disposición hacia la obediencia.
