Ser Sumisa
Si estás en presencia de tu Amo es para ser usada, no para preguntar, ni tener charlas casuales o cualquier otra cosa. Lo que pienses, lo que hables, lo que hagas, debe estar enfocado en vivir para que tu Amo esté contento y orgulloso.
No porque sea una obligación, ni porque los demás lo exigen, sino porque es lo que te da placer.
Estar sometida, sentirte sin control y saber que Él puede hacer lo que se le dé la gana contigo, ocurre no por impotencia, debilidad, ni obligación. Eso ocurre porque tú no quieres evitarlo, porque tú eres la que lo ha elegido así, porque te SIENTES llena, porque te SIENTES mujer.
Y esos sentimientos son reales, son evidencias concretas, son esos sentimientos los únicos que han podido llevarte a experiencias maravillosas, PLACENTERAS, auténticas. Cosas que ni el amor ni el romanticismo han podido, ni podrán jamás, producir en tu mente.
Por esa razón, el desarrollo de todos tus ámbitos, todas tus emociones y tus sentimientos, deberán ser expresados bajo las condiciones y parámetros del proceso que tu Amo ha establecido para buscar placer.
Desde el primer momento en que veas a tu Amo, hasta cuando se despidan e incluso sin necesidad de estar en su presencia, siempre deberás mostrar la obsesión por satisfacerlo, por sentir su semen en tu cuerpo y su orgullo en tu mente, por buscar una forma de servirle y por construir una vida bajo su yugo, bajo su placer.
La pregunta es ¿cómo lograr inspirar todo eso?
